Los lubricantes intimos tienen las siguientes funciones
Combaten la sequedad vaginal Los cambios hormonales durante el ciclo menstrual, el embarazo o la menopausia pueden reducir la lubricación de la zona, también si se está pasando por un período de estrés, o bien si estamos tomando algún medicamento que pueda resecar (es el caso de algunos tratamientos antiacné)
En cualquiera de estos casos, el uso de un lubricante íntimo aliviará la sequedad vaginal y evitará las molestias que esta puede causar en las relaciones sexuales.
Retomar el sexo después del parto. Una vez superada la cuarentena, si no hay ninguna contraindicación médica, se puede recuperar la vida sexual con normalidad. Sin embargo es posible que exista falta de lubricación durante la lactancia.
El lubricante se convierte en el mejor aliado para esos primeros encuentros tras la llegada del bebé.
Proteger la zona Al reducir la fricción, los geles lubricantes evitan lesiones por rozamiento tanto en la vagina como en el pene.
Mejorar las relaciones sexuales. al proporcionar un mayor confort, invitan a probar nuevas prácticas o a alargar la duración de las relaciones íntimas.
Intensificar el coito. hay geles lubricantes con efecto calor y con ingredientes pensados para ayudar a la excitación de forma natural, ya que aumentan la circulación en la zona íntima. Estos son especialmente interesantes si se quiere experimentar una mayor intensidad en las relaciones, ya que activan la microcirculación de la zona íntima para potenciar su sensibilidad.
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